
El vapor está en el corazón de muchos procesos de fabricación de productos químicos. Las operaciones se llevan a cabo de forma continua o por lotes, y en ambos casos pueden requerir grandes variaciones en la carga de calor. Las calderas utilizadas en este sector deben ser flexibles y receptivas, capaces de responder dinámicamente a cargas de trabajo desiguales, sin comprometer la eficiencia energética.
Nuestras calderas están diseñadas para garantizar la máxima eficiencia en todas las condiciones de trabajo, incluso durante los transitorios. Además, con nuestros sistemas internos de recuperación de calor, podemos reducir las emisiones, ayudando a las empresas a cumplir con los estrictos estándares a los que están sujetas.